"necesidad" sería "debe estar en el entorno de no más de 25 millas del trabajo". Un deseo podría ser "me gustaría Westwood" (un vecindario muy requerido), mientras que una necesidad podría ser "en el lado oeste de la ciudad" (porque el trabajo, la familia, los amigos y las actividades recreativas se encuentran allí). Las necesidades de ubicación pueden incluir proximidad a las escuelas, instalaciones recreativas de uso frecuente o medios de transporte (autobús o acceso ferroviario suburbano). Si un ítem es una necesidad o un deseo depende de las circunstancias. La cercanía a la familia puede ser una necesidad para una pareja con niños pequeños o padres ancianos a quienes cuidar, o un deseo si esos factores no están involucrados. Son elementos como estos los que hacen que una lista de verificación sea lo más útil. Después de compilar las necesidades y deseos de ubicación, se puede considerar los factores de la vivienda. Las necesidades incluyen tener todas las estructuras y sistemas esenciales de la casa en buen estado de funcionamiento. Aceptar una casa que necesita un techo nuevo porque el propietario está dispuesto a rebajar $ 7,000 del precio de publicación, aunque costará $ 10,000 reemplazar el techo dentro de dos años, no es un trato sensato. Las necesidades pueden incluir un número mínimo de dormitorios y baños, que no haya escalones, patio cercado, quizás una instalación de lavandería en el primer piso y cualquier característica sin la cual los posibles compradores hayan decidido que no pueden aceptar una casa. Los deseos son características que hacen que la casa sea más atractiva o placentera: una cocina renovada, vestidores, un dormitorio principal en suite. Por supuesto, la necesidad de un comprador es el deseo de otro comprador. El punto es conocer tus propias necesidades y deseos para que puedas evaluar fácilmente las propiedades potenciales y hacer que el proceso sea más fluido.
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