¿El exterior de la casa, está en buen estado y bien cuidado? Busca evidencia de agua alrededor de los cimientos, lo que puede indicar problemas de drenaje. El suelo debe tener una inclinación hacia lejos de los cimientos. Si hay un porche, debe tener cimientos, no simplemente estar apoyado en la tierra. Verifica que los caminos de entrada y los senderos que conducen a la casa no tengan grietas ni se estén derrumbando. Verifica que el revestimiento de la casa esté en buenas condiciones. Mira el enjardinado de la propiedad. No debe estar descuidado y antiestético, ya que eso puede indicar falta de cuidado. El sistema de rociadores, si lo hay, debe estar en buenas condiciones de funcionamiento. Si hay un deck, asegúrate que no tenga destrucción o daño por termitas o insectos.
LA HISTORIA DE LA PROPIEDAD
Es una buena práctica saber todo lo que sea posible sobre el historial de ventas de la propiedad que estás considerando. No te conformes con la información que aparezca en la copia de las publicaciones del cliente. Pregúntale a u agente para obtener información más detallada. Encuentra respuestas sobre cuánto tiempo lleva la propiedad en el mercado y si anteriormente se publicó, se retiró y/o se volvió a publicar a un precio más bajo. Este tipo de preguntas pueden ayudarte a decidir cuánto ofrecer. También necesitarás información detallada sobre la propiedad, la mayoría de la cual estará disponible en los registros públicos. Un poco de investigación en línea revelará el nombre del propietario, la edad original de la casa, el historial de la hipoteca, el número de parcela, las ventas anteriores de la propiedad, las escrituras de la propiedad y cualquier juicio o gravamen presentado contra el vendedor. La información sobre a cuánto ascienden los impuestos a la propiedad y si están pagos o atrasados, también estará disponible en los registros.
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